Menopausia

La menopausia es una etapa natural en la vida de la mujer que se caracteriza por la disminución de la producción de estrógenos y progesterona por los ovarios. Esto conduce a una serie de cambios físicos y hormonales que pueden afectar a la salud, el bienestar y la calidad de vida de la mujer.

Entre las necesidades físicas más comunes de las mujeres en la menopausia se encuentran:

  • Control de peso: La disminución de los estrógenos puede provocar un aumento de peso, especialmente alrededor de la cintura. Es importante seguir una dieta saludable y equilibrada, así como realizar ejercicio físico de forma regular.
  • Salud ósea: La disminución de los estrógenos también puede aumentar el riesgo de osteoporosis, una enfermedad que debilita los huesos. Es importante consumir alimentos ricos en calcio y vitamina D, y realizar ejercicio físico de impacto.
  • Salud cardiovascular: La menopausia también puede aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares, como el infarto de miocardio y el accidente cerebrovascular. Es importante controlar el colesterol, la presión arterial y el azúcar en sangre.
  • Salud vaginal: La disminución de los estrógenos puede provocar sequedad vaginal, lo que puede causar molestias durante las relaciones sexuales y aumentar el riesgo de infecciones. Es importante utilizar lubricantes vaginales y acudir al médico si las molestias son intensas.
  • Salud mental: La menopausia también puede provocar cambios en el estado de ánimo, como ansiedad, depresión e irritabilidad. Es importante hablar con el médico si estos cambios son intensos o duraderos.

A continuación se ofrecen algunos consejos para cuidar la salud física durante la menopausia:

  • Alimentación saludable: Consumir una dieta rica en frutas, verduras, cereales integrales, legumbres y pescado.
  • Ejercicio físico regular: Realizar al menos 30 minutos de actividad física moderada la mayoría de los días de la semana.
  • Mantener un peso saludable: Evitar el aumento de peso y mantener un índice de masa corporal (IMC) saludable.
  • Dejar de fumar: Fumar aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares, osteoporosis y otros problemas de salud.
  • Reducir el consumo de alcohol: El consumo excesivo de alcohol también aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares, osteoporosis y otros problemas de salud.
  • Controlar el estrés: El estrés puede empeorar los síntomas de la menopausia. Es importante encontrar formas de manejar el estrés, como la relajación, el yoga o la meditación.

Si experimentas algún síntoma de la menopausia que te preocupe, es importante hablar con tu médico. El médico puede ayudarte a determinar la causa de los síntomas y recomendar el tratamiento adecuado.

Y si te interesa cuidarte, equilibrarte y transitar esta fase de la manera más natural posible: SIMPLEMENTE HAZLO.  Existen herramientas holísticas, naturales, sin contraindicaciones y muy al alcance.  Es una cuestión de intención y el camino aparece.

¿Qué nos ofrece el yoga durante la menopausia?

Pues creo que como ejercicio saludable, el yoga no tiene parangón.  La práctica de todos los tipos de posturas (de pie, flexiones hacia delante, hacia atrás, torsiones, inversiones, etc) tiene una repercusión directa en la salud.  Cada postura tiene un efecto y si esa postura se enmarca en una secuencia bien programada, los efectos de la práctica son invaluables.

Como profesora y practicante tengo que dar las gracias al yoga por estar en mi vida.  Como mujer menopáusica estoy súper contenta de contar con esta herramienta milenaria, de salud constatada, tanto a nivel físico gracias al Maestro Iyengar y su desarrollo postural, como a nivel mental, gracias a los efectos fisiológicos del asana, como a la influencia de la meditación.

Podríamos decir que todas las necesidades físicas de las mujeres durante la menopausia quedan más que cubiertas con la práctica de Yoga.    Tenemos yoga para la fuerza y la activación muscular, para la relajación mental, para trabajar el suelo pélvico, para trabajar el sistema hormonal.

El yoga consta de tantas formas, tantas aplicaciones y tantos efectos, que sinceramente, no tiene parangón.  Ahora, hay que aprender con corrección y de la mano de un profesor que conozca realmente los efectos de la práctica y sepa ayudarte a elegir y seleccionar aquello que a ti más te conviene.

Nuestra salud Física, Mental y Emocional agradecerán enormemente el esfuerzo de iniciar la práctica, porque ya sabéis que una vez que extendemos el antideslizante -siempre lo más difícil- lo demás viene rodado.

Y si no sabéis por dónde empezar, por supuesto os recomiendo mis cursos Yoga para la Mujer y Suelo Pélvico.